El Gobierno japonés indultará a 600.000 delincuentes para celebrar la coronación del emperador Naruhito el próximo 22 de octubre. Solo serán perdonados aquellos que hayan cometido delitos menores.
El gobierno anunciará quiénes serán los elegidos para dicho indulta o para una reducción de la sentencia a finales de mes.
A los indultaros se les levantarán las restricciones de sus derechos legales. En Japón, quienes hayan sido condenados tienen prohibido trabajar como médicos durante cinco años.
Durante la ceremonia de entronización del emperador Akihito, 2.5 millones de personas fueron indultados. Y es que es costumbre declarar el perdón por los eventos importantes que tienen relación con la Casa Real Japonesa.