Elena viajó Sanxenxo para arropar a Juan Carlos I tras los audios difundidos

Tras dejarse ver este viernes, 4 de octubre, en aguas de Sanxenxo disfrutando de las regatas con su hija, la Infanta Elena, Juan Carlos I reapareció el sábado ante las cámaras con un plan completamente distinto.

Ajeno a los audios que se han publicado en las últimas horas, hablando con Bárbara Rey, por ejemplo, sobre su relación matrimonial con la reina Sofía, el emérito acudió a un conocido restaurante de la localidad gallega para disfrutar de una comida con personas de su entorno.

‘Cumbre’ familiar

Acompañado por Pedro Campos y su mujer, y la infanta Elena, el emérito saludó amistosamente a la prensa cuando bajaba del vehículo y comentó el mal tiempo que estaba haciendo en la localidad: "Ayer bien, pero hoy un día fatal”.

De esta manera, parece ajeno a los audios que han salido a la luz sobre sus conversaciones telefónicas con la vedette, y sigue contando con el apoyo de los suyos cuando su nombre circula con más fuerza en España.

Con Elena 

Sin embargo, esa apariencia de normalidad esconde la realidad de que, según fuentes de su entorno a Monarquía Confidencial, se organizó una ‘cumbre’ con la infanta Elena donde se trataron los temas que más le preocupan sobre su padre, don Juan Carlos. 

“Quiere proteger como sea a su padre”, comentan las fuentes consultadas por Monarquía Confidencial. 

Como ya adelantó MC hace unos días, Elena expresó a su entorno más cercano su apoyo a don Juan Carlos en la decisión de publicar sus memorias. “Es conocedora y apoya a su padre en sus decisiones, porque considera que no ha hecho nada incorrecto”, concluyen las fuentes. 

Al mismo tiempo, Elena ha trasladado a don Juan Carlos su preocupación por los audios de las conversaciones con Bárbara Rey, que no le dejan en muy buen lugar. 

“No entienden el por qué de esta situación ahora”, comentan desde su entorno. 

Discreción y perfil bajo 

Don Juan Carlos ha ido aumentando la frecuencia de sus visitas a Sanxenxo, donde aprovecha para estar con amigos y disfrutar de la ría. Esas estancias discretas, de perfil bajo, y residencia de nuevo en casa de Pedro Campos, estuvieron en un primer momento condicionadas por las advertencias de Zarzuela que no llamara la atención. El emérito acató las indicaciones.

Como se ha contado en estas páginas, don Juan Carlos afirma que no quiere dañar la imagen de su hijo, el rey, según fuentes cercanas al entorno de Felipe VI. 

“Entre padre e hijo pueden surgir diferencias, pero don Juan Carlos mide sus movimientos para evitar perjudicar a don Felipe. Y también a su nieta, la princesa de Asturias”, aseguran, por su parte, fuentes cercanas al emérito.

Sin embargo, otras fuentes plantean que ese nuevo movimiento de don Juan Carlos, con la iniciativa de publicar unas memorias, va a complicar de nuevo la relación entre padre e hijo.

Planes ‘frustrados’

La relación de don Juan Carlos con Zarzuela y con Felipe VI está siendo complicada de gestionar estos últimos días, aunque desde palacio no se han pronunciado. 

Fuentes cercanas al emérito han asegurado a Monarquía Confidencial que algunos de los planes que se iban a ejecutar en un breve espacio de tiempo se verán ‘frustrados’ por la nueva situación. Como, por ejemplo, el plan de mudarse a residir a España a corto plazo.

Como ha podido saber MC, por fuentes cercanas, el eméritoinsiste en que lo que ha contado son experiencias personales y por tanto que no ha hecho nada ‘malo’. No obstante, la publicación de las fotografías con Barbara Rey, pero más aún la audición de las conversaciones que mantenían, han sido una sorpresa, que se ha sumado al malestar que ya existía en Zarzuela por el anuncio de la biografía.