Juan Carlos I pasará dos semanas en España para disfrutar de la vela y de los amigos

Acudirá a la 9º regata que lleva su nombre que se disputará en Sanxenxo el 27 de septiembre

El rey emérito, Don Juan Carlos de Borbón, llega a la parroquia del Sagrado Corazón y San Francisco de Borja para asistir al enlace matrimonial entre José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo Moreno. Foto de archivo.
El rey emérito, Don Juan Carlos de Borbón, llega a la parroquia del Sagrado Corazón y San Francisco de Borja para asistir al enlace matrimonial entre José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo Moreno. Foto de archivo.

Juan Carlos I regresará a Sanxenxo el próximo 23 de septiembre. Como ha podido saber Monarquía Confidencial, por fuentes del Club Náutico de Sanxenxo, el emérito pasará unos días en España disfrutando de regatas y de amigos. “Viene el 23 y se vuelve a Abu Dabi el 6 de octubre”, confirman.

En aguas de Pontevedra se disputará, el próximo 27 de septiembre, la 9º regata Rey Juan Carlos, en la que estará presente el rey emérito. 

Fuentes cercanas han trasladado a MC las ganas del padre de Felipe VI por volver a España. “El emérito está feliz. Quiere disfrutar de los suyos el mayor tiempo si es posible, y, si es en España, mejor”. 

Menos visibilidad

La última vez, don Juan Carlos llegó a Vigo, la estancia se desarrolló con menos visibilidad y presencia de medios.

Se dejó ver bajando las escaleras del avión privado con algo de dificultad, aunque sin ayuda de sus hombres de confianza. Una vez en suelo español, con todo el equipaje en el vehículo de su amigo Pedro Campos, se dirigió a la residencia que utiliza enSanxenxo.

“Realiza la misma rutina siempre. Don Juan Carlos quiere asegurarse que todo sigue en orden”, cuentan fuentes de su entorno. 

Sigue en casa de Campos 

Cada vez que don Juan Carlos visita España para unas jornadas de vela, hasta el aeropuerto de Vigo se desplaza su íntimo amigo Pedro Campos, para recogerle y llevarle hasta su domicilio, donde se aloja.

“La búsqueda de una vivienda adaptada a sus necesidades está paralizada -dicen en el entorno de Zarzuela-. Campos le ha invitado a seguir quedándose en su domicilio todas las veces que necesite”.

Estos viajes, ya muy habituales, de don Juan Carlos al norte de España, no molestan a su hijo, el rey Felipe, ni tampoco recibe ahora directrices en la línea de mantener un perfil bajo, como sí ocurrió en las primeras ocasiones, cuando la manera de proceder del emérito no agradó en Palacio y generó fricciones entre padre e hijo.

 

‘El abuelo’

Monarquía Confidencial ha podido saber que varios miembros del equipo de seguridad de Zarzuela son enviados a Pontevedra durante las estancias de don Juan Carlos, con el fin de trazar un plan de seguridad de apoyo a la pareja de guardias civiles que lleva consigo en todo momento. Algunos, incluso, se refieren a él de manera cariñosa llamándole entre ellos ‘el abuelo’. 

“Ya viene el abuelo, otra vez”, suelen decir. “Lo hablan entre ellos, en petit comité. Es una forma cariñosa que tienen de nombrarle”, comentan las fuentes citadas. 

Seguridad en Sanxenxo

Como adelantó MC, el despliegue de seguridad suele estar integrado por unos diez guardias civiles, que se hospedan en varios hoteles cercanos a la casa de Pedro Campos por la proximidad y facilidad para acudir en caso de urgencia. 

Monarquía Confidencial se desplazó hace unos meses a Sanxenxo para conocer de primera mano los movimientos de don Juan Carlos durante un fin de semana de regatas. Entonces fue testigo de que algunos de los guardia civiles desplazados desde Madrid, mostraron disconformidad con las horas interminables de servicio que les tocaba, y por las rutas que realizaban tras la llegada de don Juan Carlos al municipio. 

“Ayer terminamos a las siete de la tarde, pero hoy pinta que hasta medianoche no acabamos, y eso no puede ser”, apuntó uno de ellos. 

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