La empresa de Froilán le denegó un permiso para acompañar a su abuelo a Sanxenxo
Pretendía acompañarle durante los días de las regatas e incluso organizar un encuentro con la infanta Elena
Froilán lleva algunas semanas pasando desapercibido. Al parecer, está empezando a ‘centrarse’ con ocasión de su nueva vida en Emiratos Árabes. Su trabajo en la petrolífera de un amigo íntimo de don Juan Carlos y su nueva “adicción” al deporte, serían los pilares fundamentales de su día a día.
Aunque de todavía sigue teniendo alguna rabieta de vez en cuando, según cuentas a MC personas cercanas.
La semana anterior a que don Juan Carlos viajara a Sanxenxo, Froilán avisó a la empresa de su deseo de acompañar al abuelo en las regatas que iban a tener lugar en Sanxenxo.
Regatas con su abuelo
Como era de espera, y tal como cuentan personas cercanas, el nieto de don Juan Carlos obtuvo una negativa por respuesta. Aunque no se lo tomó del todo bien, aceptó la situación.
“Siempre han estado muy unidos, pero ahora que viven muy cerca pasan mucho tiempo juntos y Froilán quiere aprovechar todo lo que pueda”, cuentan las fuentes citadas.
La intención de Felipe Juan Froilán era viajar con su abuelo a la localidad gallega, y después volver en solitario a Abu Dabi para reincorporarse al trabajo.
En este viaje que finalmente no pudo ser, también se contempló la idea de coincidir en Sanxenxo con su madre, la infanta Elena. Aprovechando que tanto Juan Carlos I como Froilán podrían haber pasado unos días juntos en Sanxenxo, era la oportunidad perfecta para reunirse con ella.
“Teniendo en cuenta el perfil bajo de este viaje, no estaba la situación como para reunirse los tres en España”, aseguran sin embargo desde el entorno del emérito.
Tensión
Froilán contó a su abuelo sus deseos de viajar con él, y aunque se desconoce si su intención era que intermediara con la empresa para conseguirle este permiso, sí se respiró tensión en el entorno del emérito ante la posibilidad de que el desplazarse los dos juntos a España perjudicara los planes de viajar a Sanxenxo.
“Si ya resultó tenso conseguir el permiso de Zarzuela a Juan Carlos I para la visita a Sanxenxo, presentarse con su nieto hubiera sido un escándalo. Justo lo que no querían”, sentencian las fuentes citadas.
Madurez
Monarquía Confidencial adelantó que Froilán no estaba del todo asentado en su nuevo país. “Se siente como un pez fuera del agua. Allí no tiene amigos”, aseguraron fuentes cercanas a la infanta Elena.
Tenía problemas para encontrar un círculo de amigos, y su inquietud porque no sabe si va a encontrar allí gente con la que salir, preocuparon al nieto de Juan Carlos I. Sin embargo, esta nueva vida le ha permitido conocer a compañeros de trabajo con lo que ha establecido una cierta confianza y con los que hace planes.
El deporte y los planes tranquilos en restaurantes son su nueva forma de vida y por ende, ha permitido que, en cierta manera, la madurez llegue a su vida.
El rey emérito se preocupa a diario de que su nieto consiga encontrar su camino, aunque sea lejos de casa.
