La infanta Cristina reflexiona a solas en Grecia los términos de su divorcio con Urdangarin

Las exigencias del ex duque de Palma para firmar la separación y la distancia con Felipe VI le han llevado a no acudir por ahora a Marivent con sus hijos y la reina Sofia

La infanta Cristina en una foto de archivo.
La infanta Cristina en una foto de archivo.
  1. Reflexión en vacaciones
  2. El dinero, principal escollo 
  3. Condiciones excesivas
La infanta Cristina en Santander. Foto de archivo.
La infanta Cristina en Santander. Foto de archivo.

Las elevadas exigencias de Urdangarin en la firma de su divorcio han provocado que la infanta Cristina haya puesto tierra de por medio y haya decidido viajar a Grecia para pasar unos días con su primo Pablo de Grecia. 

De esta manera, los planes de la hermana de Felipe VI de veranear en Marivent, como en veranos anteriores, se han visto frustrados por la situación personal que existe con su todavía marido, además de la distancia que le separa con el rey y la reina Letizia. 

Reflexión en vacaciones

Por otro lado, tal y cómo se contó en MC, este paréntesis se debe también a la situación complicada entre su hija Irene y su padre, quienes todavía no han logrado llegar a un entendimiento. 

Según informan fuentes cercanas del entorno de Cristina de Borbón a Monarquía Confidencial, la infanta ha decidido viajar a Grecia para rodearse de otros familiares que puedan aconsejarle en su situación matrimonial. 

“Es una situación complicada para Cristina porque principalmente quiere velar por el bienestar de sus hijos”, aseguran las fuentes citadas. 

El dinero, principal escollo 

Este cambio de rumbo, según las mismas fuentes, podría propiciar un acercamiento entre los ex duques de Palma de cara a la firma del divorcio. Y es que, aunque el dinero es el principal escollo, doña Cristina está dispuesta a pasarle una manutención, acorde a su modus vivendi, pero sin regular nada. 

Además, la infanta se ha refugiado en numerosas ocasiones en su padre, don Juan Carlos, que entró en escena y habló con su hija para aconsejarle. 

Sin embargo, la firma del divorcio se está demorando, ya que en un primer momento estaba fijada para el 5 de junio. Una fecha que finalmente se canceló porque la infanta decidió centrarse en el 18 cumpleaños de su hija Irene y en los preparativos de la fiesta que le organizó en Ginebra junto a sus familiares, entre los que se encontraban Juan Carlos I y su padre, Iñaki. 

“La firma se ha demorado porque ambos no llegan a un entendimiento económico. Es la clave para cerrar esta etapa”, asegura a MC una persona de confianza de la infanta Cristina. 

 

Condiciones excesivas

Aseguran que sufragar la escolta y la residencia donde se establezca con Ainhoa Armentia es algo a lo que no está dispuesta Cristina de Borbón.

“Ella no tiene que mantener nadie. Se van a separar, que cada uno siga su vida como mejor pueda”, asegura enfadado una de las personas de máxima confianza de la infanta, a la que ha tenido acceso MC.

Pero a pesar de la negativa de Cristina de Borbón, la precaria situación de Urdangarin remueve a su todavía mujer y estaría dispuesta a abonarle una cantidad mensual que sería de gran ayuda para el ex duque, con vistas a garantizar su seguridad, que es una de sus obsesiones.

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