La princesa Ana, figura central del reinado de Carlos III

Cuando el recién coronado rey Carlos regresó al palacio de Buckingham desde la abadía de Westminster, se vio rodeado por el mayor desfile militar que Londres había visto en siete décadas. A la cabeza iba su hermana, la princesa Ana. 

Fue un momento impactante, la primera vez que una mujer asumía tal papel en casi 1000 años de historia real. Y fue una demostración muy pública del lugar que ocupa la princesa Ana en esta nueva era. Desde que Carlos III subió al trono, Ana ha desempeñado un papel cada vez más central en la Familia Real.

Momentos delicados

La Princesa estaba con el rey en Balmoral en el momento en que comenzó su reinado. Los dos hermanos habían estado con su madre, la Reina Isabel II, en las últimas horas de su vida. Cuando Isabel II falleció el 8 de septiembre de 2022, la princesa estaba al lado de su hermano. 

Y cuando éste partió hacia Londres al día siguiente, ahora rey, Ana se quedó para acompañar a su "querida mamá" en su último viaje. Nunca se separó de su lado. Su devoción, que incluyó reverencias con la espalda recta ante el féretro en más de una ocasión, fue inconfundible.

Ana de Inglaterra también estuvo al lado de su hermano cuando velaron a Isabel II, primero en la catedral de St. Giles de Edimburgo y después en Westminster Hall de Londres. El rey Carlos III caminaba detrás del cortejo fúnebre en el último viaje de la reina que más tiempo ha reinado en la historia británica, fue Ana quien estuvo a su lado.

Una vez finalizado el luto oficial, la princesa retomó su ajetreada agenda de obligaciones reales, pero la atención de la familia se centró cada vez más en su trabajo. Aunque Ana llevaba mucho tiempo cumpliendo varios cientos de compromisos al año, a menudo bajo el radar real, cada vez había más interés por lo que hacía.

Además, su hermano estaba decidido a cargarla con más responsabilidades. A principios de su reinado, la nombró Coronel Jefe de la División de Casa y, unos meses más tarde, asumió el cargo de Coronel Jefe Adjunto del Regimiento Real de Escocia. El Rey asumió el cargo de Coronel en Jefe.

La princesa cabalgó junto al Rey en Trooping the Colour y ocupó su lugar en la ceremonia de la Orden de la Jarretera cuando Carlos III la supervisó como Soberano por primera vez. Por otro lado, cuando llegó el verano y la Familia Real regresó a Balmoral, fue Ana quien acompañó a los Reyes.

La princesa Ana nunca ha buscado el protagonismo, desempeñando sus funciones de un modo que ha merecido los elogios de muchos por su gran labor y su profundo interés por las funciones que desempeña. Sin embargo, no cabe duda de que en el reinado de su hermano mayor, ella ocupa cada vez más el centro del escenario. 

Confianza

Tampoco cabe duda de que el rey confía en su hermana. Ella es una parte vital de la corte del rey Carlos III.

Tras encabezar el desfile militar de la Coronación, ocupó su lugar en el balcón del palacio de Buckingham para saludar a la multitud antes de unirse a las fotos oficiales. Mientras que su consorte se situó a un lado, como es tradicional, la posición del otro lado se reservó para Ana, consolidando su posición en el corazón de este reinado. 

El día de su cumpleaños, el 15 de agosto, la Familia Real decidió celebrarlo con una imagen especial tomada el día de la coronación de Carlos III que muestra el fuerte vínculo entre hermano y hermana.

Un vínculo que ha durado más de setenta años y que, al iniciarse un nuevo reinado, ha demostrado ser más importante que nunca.