Del Toisón al PCE

ERC y PCE

Partidos con tanta vocación marginal como Esquerra Republicana y el PCE vienen acosando a la Casa Real a propósito de las cuentas. Es una de las maneras más fáciles de conseguir un teletipo mientras se desangran cuesta abajo en las encuestas. También es un paseo por la inmoderación que se desautoriza a sí mismo y ni logra permear en la sociedad ni logra resucitar a los partidos muertos. Lo más cierto es que, pese a quien pese, la monarquía nos sale casi regalada por comparación con Jefaturas de Estado republicanas o con otras monarquías, por no hablar de ministerios o de, qué sé yo, consejerías de innovación y cambio climático. El PCE se vuelve además contra el único gesto bueno de su historia, la transigencia con la corona. A efectos mediáticos, no es insensato pensar que lograrían mucho mayor efecto si hiciesen, se me ocurre, un manifiesto de adhesión. Ahí sí que todo el mundo haría caso.

El Toisón

Los selectos recipiendarios de la Orden del Toisón de Oro corren el riesgo de morir de tanto honor, habida cuenta de que el Gran Maestre –don Juan Carlos- otorga la condecoración según su “real aprecio” y pueden pasar décadas sin que se den ni se reciban tan selectos vellocinos. Su origen se pierde en el momento auroral de las monarquías europeas, del duque de Borgoña a los austrias y los borbones españoles, con controversias de legitimidad que duran siglos y que, en la práctica, han derivado en dos ramales. Con la concesión a Víctor García de la Concha se quiere subrayar, suponemos, la importancia de la lengua española, más que la historia de fracasos, perezas y errores filológicos de la Academia. Está muy bien, por más que la importancia geopolítica del español se resuma en que es la lengua que se aprende para hablar con el jardinero –no hemos logrado siquiera que Galdós sea más estudiado o traducido. En cuanto a Solana, se premia a un político trabajador y exitoso, y lo suficientemente responsable como para no haber perdido dignidad en la evolución que conocieron los miembros de su generación, de la utopía juvenil a los bombardeos de Belgrado. Políticamente, la concesión del Toisón no deja, sin embargo, de sonar a espaldarazo póstumo.

Fitur

Los Reyes inauguraron la trigésima edición de FITUR y los Príncipes de Asturias clausuraron el quinto Foro de Liderazgo Turístico. Son movimientos significativos que confirman la solicitud activa por un sector que fue una mina y ahora necesita sucesivos rescates por parte del Gobierno. La reducción paulatina del turismo nos deja con la melancolía de haber perdido el atractivo. De alguna manera, el hecho de que la familia real pase sus vacaciones en España es –véase Palma- una obligación por sus enormes beneficios. Cuenca apenas pudo contener tanta visita tras la visita de los príncipes en su luna de miel. Ojalá pudieran, ay, multiplicarse.

 
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