Portugal se prepara para la celebración del centenario del regicidio de Carlos I a manos de los republicanos
El 1 de febrero de 2008 se celebra en Portugal el centenario del atentado que ese mismo día, en 1908, acabó a tiros con la vida del rey Carlos I y de su hijo y heredero, el príncipe Luis Felipe, a manos de unos republicanos.
Los asesinos dispararon sobre la Familia Real cuando sus miembros paseaban por las calles de Lisboa en coche de caballos. Aquel magnicidio, que supuso el acceso al trono del segundo hijo del rey, el príncipe don Manuel, supuso el comienzo del fin de la monarquía portuguesa, que cayó solamente dos años después el 5 de octubre de 1910.
El rey asesinado había pretendido la mano de la infanta española doña Eulalia de Borbón, había sido gran amigo de don Alfonso XII y siempre mantuvo una excelente relación con España. Su viuda, la princesa Amelia de Orleans, fue íntima amiga de la reina regente de España, doña María Cristina, y su hijo, el último rey de Portugal, don Manuel II, fue primo hermano de la condesa de Barcelona y, por tanto, tío en segundo grado del rey don Juan Carlos.
La celebración del centenario, que ha generado un enorme interés en todo Portugal, está siendo seguida con gran atención por todos los medios de comunicación (la Radio Televisión Portuguesa emitió un debate sobre el regicidio en días pasados) y tendrá lugar en Lisboa el próximo 1 de febrero con asistencia de representantes de la República Portuguesa.
Ese día tendrá lugar, a las cinco de la tarde, una ceremonia en la Plaza de Comercio, lugar donde acaeció el regicidio, seguida de un solemne servicio religioso en la catedral lisboeta, que estará presidido por el duque de Braganza, don Duarte, jefe de la Casa Real Portuguesa , acompañado de su esposa e hijos, de sus hermanos los Infantes don Enrique y don Miguel, su tía la princesa Teresa de Orleans-Braganza y otros miembros de la familia y algunas representaciones extranjeras.
