Por qué Meghan Markle será duquesa y no princesa tras su boda con el príncipe Enrique
Los expertos prevén que la reina de Inglaterra ha reservado el ducado de Sussex, vacante desde 1843, para el segundo hijo de Carlos
La monarquía del Reino Unido volverá a celebrar una boda en la primavera de 2018. El príncipe Enrique ha anunciado su intención de contraer matrimonio con su novia, Meghan Markle, para la que la casa real ya ha decidido qué títulos ostentará.
Ahora que la actriz estadounidense Meghan Markle está comprometida con el príncipe Harry, su título real es uno de los temas clave que están aún por resolver. Sin embargo, a diferencia con Kate Middleton tras su boda con el príncipe Guillermo (llamado a ser rey), no se le otorgará un título de princesa, sino de duquesa.
Cuando Kate se casó con el príncipe Guillermo, la pareja recibió sus títulos reales de duque y duquesa de Cambridge. Sin embargo, se espera que al ocupar el trono después del Príncipe Carlos, Guillermo se convierta en el Príncipe de Gales y Kate, por lo tanto, en la Princesa de Gales.
Enrique es el quinto en el orden de sucesión al trono y descenderá al sexto después de que el tercer hijo de Guillermo y Kate nazca en abril de 2018. La mayoría de los expertos en la casa real británica pronostican que si la reina le concede un ducado real, como el príncipe Guillermo recibió en su boda de 2011, Harry pasará a ser duque de Sussex el mismo día de su boda. Esto convertiría a Meghan en la duquesa de Sussex.
Una de las cuestiones que estaban pendientes de resolver ante este anuncio de boda es dónde residirá Meghan Markle ahora que se encuentra prometida con el príncipe Enrique. Clarence House ha confirmado que se instalará esta semana en Nottingham Cottage, la residencia de Enrique de dos habitaciones situada en el Palacio de Kensington de Londres.
