Carlos de Inglaterra se asoma a la revista Vogue vistiendo ropa vieja y reciclada para así promover el sentimiento ecologista

El primogénito de Isabel II declara ser un apasionado del reciclaje y la reutilización de la prendas de vestir. Tanto, que su vestuario está compuesto por piezas antiguas y reutilizadas para evitar el malgasto, e incluso la mayor parte presentan una década de antigüedad.

“Tengo un par de zapatos hechos de cuero salvado de un barco del siglo XVIII en el suroeste de Gran Bretaña. Son totalmente indestructibles y me sacan del apuro” señala.

En el reportaje, Carlos pide a los lectores vestir ropas viejas y recicladas, además de escoger tejidos naturales, como la lana, en lugar de fibras artificiales derivadas del petróleo. Con ello pretende reducir la cantidad de basura producida y conservar los limitados recursos del planeta.

Según el heredero británico, el gusto por la ropa vieja es en la actualidad un ejemplo perfecto de por qué cree que la moda tiene un rol en la ayuda para afrontar algunos de los desafíos ambientales."Esta tendencia no es sólo una atracción por un diseño retro y el encanto de lo antiguo: tiene mucho futuro".

Su apoyo al movimiento ambientalista se ha concretado con la iniciativa ‘Start’. Un proyecto que busca concienciar a los británicos en la lucha contra el cambio climático.