El Reino Unido otorga asilo a una princesa saudí
La mujer, casada con un miembro de la familia real saudí, permanece bajo anonimato en tierras inglesas debido a la pena por lapidación que tiene en su país. Su delito, tener un niño ilegítimo con un hombre del Reino Unido.
Se enfrenta a la pena de muerte si vuelve a casa. O es posible que antes de eso, sufra un asesinato por “motivos de honor”. Esta es la información que recoge el Daily Mail en cuanto al caso de la princesa árabe refugiada. En un viaje a Londres, la mujer queda embarazada y vuelve a su país, pero regresa a la capital europea para dar a luz en secreto por miedo a las represalias.
El Tribunal de Inmigración le ha concedido asilo permanente después de que ella manifestara sus miedos hacia lo que podían hacerle a ella y al bebé. La lapidación es una pena “corriente” en Arabia Saudí por causas de adulterio pero también es posible la decapitación o la horca en plazas públicas.
El brutal procedimiento, que se sigue practicando en países de África, Asia y Oriente Medio, lleva años intentándose prohibir por parte de organizaciones internacionales, ya que viola de manera brutal artículos fundamentales como “el derecho a la vida” o “la prohibición de torturas, tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes”.
