Miriam Ungría, la esposa de Kardam de Bulgaria abandonó el hospital de La Paz y al Príncipe Kardam le amputan dos dedos
Miriam Ungría, esposa del Príncipe Kardam de Bulgaria, abandonó el hospital de La Paz, donde quedó ingresada después de sufrir un accidente de tráfico junto a su marido el pasado 15 de agosto en la A-1 a la altura del kilómetro 42 cerca de El Molar. Fuentes de este centro sanitario informaron de que recibió el alta el jueves pasado y abandonó entonces el centro hospitalario. Mientras, Kardam de Bulgaria sigue ingresado en el Hospital Doce de Octubre aunque ha mejorado mucho en los últimos días. Los médicoa le han sacado del coma inducido y la anunciada amputación de las manos ha quedado únicamente en la pérdida de dos dedos.
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Kardam de Bulgaria fue trasladado al Hospital Doce de Octubre tras sufrir el accidente en estado muy grave, y con un traumatismo craneoencefálico severo. Aunque, a partir del primer día, y por expreso deseo de la familia, el centro médico no ha facilitado ningún nuevo parte médico, los familiares han trasmitido a Monarquía Confidencial que su estado sigue siendo grave.
Lo que más preocupa a sus padres y hermanos es la recuperación del Príncipe de Tirnovo, título del heredero de los derechos dinásticos de Bulgaria. Al traumatismo craneoencefálico, del que aun no se ha recuperado, había que añadirle heridas muy graves en ambas manos que, en el momento del ingreso y primer parte médico llevaron a los médicos a hablar de una amputación. Pero, según personas cercanas a la familia, los médicos han decidido sacar a Kardam de Bulgaria del coma inducido en el que permanecía en la UVi y, definitivamente, han descartado la amputación de las manos. Únicamente ha sido necesaria la amputación de dos dedos, lo que demuestra la buena recuperación que está experimentando.
Su esposa, Miriam Ungría, con la que el Príncipe ha tenido dos hijos, sufrió heridas mucho más leves: fractura de codo y diversas contusiones. Son precisamente estas contusiones las que han provocado una recuperación más lenta de lo esperado. Las imágenes de su salida del hospital el pasado jueves, hacen pensar en cualquier caso que las heridas no eran tan leves como en un primer momento se apuntó.
