Fallece en Madrid la gran duquesa Leonida Georgiyevna, viuda del gran duque Wladimir Kirilovich de Rusia

S.A.I. la gran duquesa, “de iure” S.M. la emperatriz viuda de Rusia, ha fallecido en Madrid la noche del 23 al 24 de mayo de 2010 tras una larga enfermedad a los 95 años y siete meses de edad. Era la viuda del gran duque Wladimir Kirilovich de Rusia, Jefe de la Casa Imperial. Ambos eran los padres de la actual Jefe de la Casa, la gran duquesa María Wladimirovna de Rusia.

Nacida en Tiflis el 6 de octubre de 1914, era hija del príncipe Jorge Bagratio de Moukhrani, Jefe de la Casa Real de Georgia, y de la princesa Elena Sigismundovna, nacida Novina-Zlotnicka. La rama georgiana de los Bagration se inició con el rey Bagrat, llegado a Georgia en 575. La casa reinante de Moukhrani comenzó en 1469. En 1783, con la firma del Tratado de Georgievsk, el reino de Georgia, aunque manteniendo cierta autonomía y su antigua monarquía, pasó a depender de los emperadores de Rusia. Durante el reinado del zar Alejandro I este tratado fue roto.

Con la muerte del rey Jorge XII, Georgia se convirtió en parte del Imperio Ruso y la dinastía Bagration fue apartada del trono en 1801, aunque siempre mantuvo pretensión al mismo. La rama antiguamente reinante se extinguió a finales del siglo XIX, momento en el que pasaron los derechos sucesorios a la rama a la que pertenecía la gran duquesa Leonida. Su abuelo el príncipe Alejandro Iraklijevich fue asesinado en 1918, lo mismo que su padre, a manos de los estalinistas. La madre de Stalin había sido lavandera en casa de los Bagration.

La familia partió al exilio en Alemania en 1921 pero regresó en 1923 a Tiflis, capital ya entonces de una de las repúblicas soviéticas, donde permaneció hasta 1931 cuando se trasladó con su familia a Francia. Estaban siendo acosados por los soviéticos, a pesar de que el escritor Alexeï Maksimovitch Pechko –más conocido como Máximo Gorki-, que disfrutó del mecenazgo de los Bagration, intercedió por ellos logrando que gozaran de cierta protección y pudiera abandonar Rusia en compañía de su madre.

El 6 de noviembre de 1934 contrajo primeras nupcias en la ciudad francesa de Niza con el norteamericano -nacido en Wilkes Barre, Pennsylvania- Sumner Moore Kirby, fallecido el 11 de abril de 1945 en el hospital de Leau, cerca del campo de concentración de Buchenwald, donde había sido deportado, y que ya había estado casado antes dos veces, primero de 1925 a 1931 con Doris Wayland, que le dio una hija en 1928, Gloria, y luego con Valentine Wagner, de 20 de enero de 1932 a 19 de julio de 1934 -hija de la princesa Isabel Bagration- que no le dio hijos.

El 26 de enero de 1935 Leonida dio a luz en Ginebra a su primera hija, Helene Louise, hecha Condesa Dvinskaya por su luego padrastro. Se divorció el 18 de noviembre de 1937 y al iniciarse la Segunda Guerra Mundial se estableció en España. El príncipe Irakly Bagration de Moukhrani, hermano de Leonida, contrajo matrimonio con la infanta Doña Mercedes, hija del infante Don Fernando de Baviera. Éste preguntó al gran duque Wladimir si el matrimonio podía ser considerado no morganático. Fue entonces cuando el Jefe de la Casa Imperial confirmó mediante Decreto de 5 de diciembre de 1946 el estatus real de la Casa de Bagration.

Cuando se convirtió en gran duquesa de Rusia, al casar en segundas nupcias en Lausanne el 13 de agosto de 1948 con el que desde hacía diez años era Jefe de la Casa Imperial, el gran duque Wladimir Kirilovich de Rusia, obtuvo el tratamiento de Alteza Imperial. Con su segundo esposo, a quien conoció en España, la gran duquesa Leonida tuvo en Madrid el 23 de diciembre de 1953 a la citada gran duquesa María Wladimirovna, actual Jefe de la Casa Imperial. Se instalaron en la localidad bretona de Saint-Briac. Allí, en París y Madrid residió Leonida hasta su muerte. En 1957 falleció el padre de Leonida y la jefatura de la Casa Real de Georgia pasó a su hermano el príncipe Irakly.

Leonida visitó Rusia junto a su marido en noviembre de 1991, primera vez que entraba en ese territorio desde la segunda partida de su familia. Desde entonces ha regresado allí más de treinta veces. Era muy religiosa, dentro de la Iglesia Ortodoxa Rusa, y apoyó siempre la labor de su marido y de su hija en la defensa de los intereses de Rusia y de su Casa Imperial, logrando en octubre de 2008 la rehabilitación oficial por parte de la justicia rusa del emperador Nicolás II, la emperatriz Alejandra Feodorovna y sus hijos como víctimas de una cruel masacre.

Dedicó también sus esfuerzos a respaldar y formar muchas organizaciones caritativas dedicadas a huérfanos, inválidos y ancianos, siendo además mecenas de artistas rusos. En 1994 tuvo la fortuna de ver como sus padres fueron sepultados en el panteón familiar de los reyes de Georgia en Mskhetu y al año siguiente jugó un papel fundamental en la reinhumación de sus suegros, el gran duque Kiril Wladimirovich y la gran duquesa Victoria Feodorovna, en la catedral de Pedro y Pablo en San Petersburgo, lugar donde también será enterrada la gran duquesa Leonida.

Falleció acompañada por su hija en un hospital de Madrid donde había ingresado la tarde anterior tras haber sido visitada en su casa por un sacerdote. El Patriarcado de Moscú expresó sus condolencias tan pronto supo la noticia. No en vano impulsó dentro de sus posibilidades el renacimiento de la Iglesia en Rusia.

 

Amadeo-Martín Rey y Cabieses

Video del día

Marta Rovira confirma que negocia con Sánchez
un referéndum de independencia para Cataluña
Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato