La puesta a punto del yate del rey antes de su venta
Cambio de nombre, una remodelación interior y varias inspecciones generales
La Fundación para la Cultura y el Turismo de las Islas Baleares (Fundatur) está poniendo a punto el yate de don Juan Carlos de cara a su inminente venta. En los últimos meses, la embarcación bautizada anteriormente como Fortuna se ha visto sometida a varias reformas, entre ellas el cambio de nombre.
El yate del que hizo uso el rey durante más de una década en sus jornadas de descanso en Mallorca ya no se llama Fortuna.
La embarcación Foners, así es como se conoce actualmente, cambió su nombre por deseo expreso de los empresarios de Baleares.
“Desvinculación de la corona”
Los integrantes de Fundatur, cuando les fue devuelta la embarcación por parte de Patrimonio Nacional, decidieron cambiar el nombre del yate.
Según ha podido saber Monarquía Confidencial, el motivo de bautizar al 'ex Fortuna' como Foners se debe a una “desvinculación del barco con la familia real”.
Los empresarios de Baleares, que no querían que el yate continuara llamándose de esa manera, firmaron un acuerdo unánime por el que anulaban el nombre con el que don Juan Carlos le bautizó.
Además, estos mismos empresarios coinciden en que los círculos en los que se negocia la compra del barco identifican su procedencia a pesar de que ahora la embarcación se conozca como 'Foners'.
Puesta a punto para su venta
El 'ex yate Fortuna' se venderá en 2014. Así lo han confirmado fuentes del entorno de Fundatur a este confidencial.
Los empresarios de Baleares han recibido numerosas ofertas para la adquisición de la embarcación. Por ello, y ante la demanda de clientes que se han interesado por el Foners, Fundatur ha llevado a cabo algunas reformas con el objetivo de conservar el barco en condiciones óptimas.
Cambio en la decoración y dos inspecciones
Entre las “pequeñas modificaciones” a las que se ha visto sometido el yate en los últimos meses, una de ellas es su reforma interior.
El ex Fortuna ha sido remodelado en lo que respecta a la decoración de algunas de sus habitaciones. Según ha podido saber MC, el yate también ha experimentado algunas “mejoras de adaptación”.
Además, Foners ha sido supervisado en los últimos meses en dos ocasiones. La primera de ellas se produjo después del verano y, a finales de 2013, el yate fue sometido a una segunda inspección general para ratificar que se encuentra en perfectas condiciones.
