La vida de los duques de Cambridge después del verano: se trasladarán al campo y utilizarán Kensington como oficina
El nuevo trabajo de Guillermo y la falta de privacidad, algunos de los motivos de este cambio
Los príncipes Guillermo y Catalina experimentarán algunos cambios en su vida después de las vacaciones estivales. El duque de Cambridge comenzará a formarse en septiembre para su nuevo trabajo de pilotaje de ambulancias aéreas, un hecho que ha influido en el traslado de residencia de la pareja y su hijo.
Los duques de Cambridge y el príncipe Jorge dejarán de vivir después del verano en su apartamento del Palacio de Kensington. Guillermo y Catalina habían realizado recientemente reformas en la vivienda por un coste de más de cinco millones de euros.
El heredero al trono británico desempeñará su trabajo como piloto de ambulancias aéreas para la East Anglia Ambulance Service en el condado de Norfolk, por lo que los príncipes han decidido mudarse a Anmer Hall, una mansión ubicada en este territorio y regalo de la reina Isabel II a su nieto por su trigésimo cumpleaños.
Otro de los motivos que ha llevado a la pareja a cambiar de residencia, además de por el futuro empleo de Guillermo, es la falta de privacidad de la que disponen en su residencia actual.
El Palacio de Kensington está permanente rodeado de fotógrafos que intentan tomar alguna instantánea de los duques y su hijo. En cambio, Anmer Hall, situada en pleno campo, permitirá a los príncipes y su primogénito llevar una vida más relajada.
El nieto de la soberana británica seguirá utilizando la vivienda de Kensington para realizar labores de oficina.
