Desfile de novios 'royals' en el Gran Premio de F-1 de Mónaco
Carlota Casiraghi, hija de la princesa Carolina de Mónaco, ocupó este fin de semana un puesto de excepción durante el Gran Premio de Mónaco de F-1 y, gracias a su belleza, desvió toda la atención mediática de los pilotos a su persona.
En ausencia de Carolina y Estefanía de Mónaco, el príncipe Alberto permitió a su sobrina que se convirtiera en la imagen del principado durante la entrega de premios. Como en una película hollywoodiense, tanto Carlota como sus hermanos Andrea y Pierre Casiraghi aprovecharon el espectáculo para posar con sus respectivas parejas: Carlota con Alex Dellal, Andrea con su ineparable Tatiana Santo Domingo y el pequeño -ya no tan pequeño- Pierre con la aristócrata italiana Beatrice Borromeo.
Alberto de Mónaco volvió a aparecer con su novia Charlene Wistock, aunque el anuncio de compromiso de boda no parece muy cercano. Al Gran Premio de Mónaco de F-1 también acudió la princesa Beatriz de Inglaterra, hija de Sarah Ferguson y el príncipe Andrés, a la que acompañó su novio Dave Clark.
