La no luna de miel de tres meses de los reyes de España

Las informaciones de The Telegraph no dicen que el viaje tuviera esa duración ni que se extendiera hasta agosto

Don Felipe y doña Letizia el día de su boda.
Don Felipe y doña Letizia el día de su boda.

Los escándalos que en los últimos meses han señalado a Juan Carlos I llevaron a Felipe VI a levantar un cortafuegos con su padre, para que la Corona no se viera perjudicada. Sin embargo, la última publicación del diario británico Daily Telegraph le ha afectado, al referirse a su luna de miel tras la boda con doña Letizia.

El corresponsal del Telegraph en Madrid, James Badcock, reveló hace unos días que el viaje de novios de los entonces príncipes de Asturias había costado casi 500.000 dólares, de los que más de la mitad (269.000) los abonó Navilot, una empresa propiedad de Josep Cusí, amigo personal de Juan Carlos I.

El diario británico aseguró que, según documentos que había podido consultar, la luna de miel comenzó en Jordania, donde los príncipes acudieron a una boda de la familia real jornada, y tuvo como hitos del viaje Camboya, Fiyi, Samoa, California y México. En Fiyi, por ejemplo, pasaron cinco noches en un complejo exclusivo llamado Wakaya, por un total de 33.000 dólares. Incluso publicó la dedicatoria que dejaron allí, y desveló que en una de las estancias se registraron como “Mr. and Mrs. Smith”.

Numerosos medios españoles se han hecho eco de esta noticia. Citan la información del Telegraph, pero curiosamente muchos coinciden en señalar algo que no aparece en la noticia del periódico británico: hablan de que el viaje “duró varios meses”, concretamente “de mayo a agosto”.

Sin embargo, el Telegraph no dice en ningún momento que dicho viaje durara dos o tres meses, ni que se extendiera hasta agosto, como han señalado algunos. De hecho, sólo habla de “los vuelos de la pareja real en junio de 2004”.

El Chivato ha podido saber que la noticia del diario británico ha llamado la atención de algunos aficionados y seguidores de la monarquía, que han constatado que “algo no cuadra”. En algunos foros de historia de la realeza han estado buscando información, a partir de noticias publicadas en medios de comunicación, e incluso han elaborado una larga y detallada cronología de los actos públicos de los príncipes Felipe y Letizia desde su boda el 22 de mayo de 2004 en Madrid hasta finales de agosto.

Su conclusión es que algunos medios han terminado mezclando el viaje de novios en sí, con visitas oficiales al extranjero para así mostrar ahora “una supuesta luna de miel, privada e interminable”, cuando lo cierto es que los actuales reyes sólo ‘desaparecieron’ unos veinte días hasta septiembre.

The Telegraph señala que los reyes iniciaron su viaje desde Aqaba, en Jordania. Efectivamente, tras casarse el 22 de mayo en Madrid, los príncipes pasaron unos días recorriendo España (Cuenca, Teruel, Zaragoza, Navarra, Guipúzcoa...), antes de volar a Jordania.

El 27 de mayo asistieron a la boda de Hamzah, entonces príncipe heredero de Jordania, y Noor en Amán. Y el 31 de mayo se publicaron fotos suyas en Petra, la capital del antiguo reino nabateo; es decir, aún estaban en Jordania.

 

No se supo oficialmente nada de ellos hasta el 22 de junio, cuando se informó de que habían llegado a España tras su luna de miel. El 24 de junio don Felipe y doña Letizia se dejaron ver en el acto en el Palacio Real de Madrid con motivo del santo del rey Juan Carlos. El príncipe lucía barba y comentó que el viaje de novios se le había hecho muy corto.

A partir de entonces, los usuarios de esos foros sobre realeza han rescatado noticias que ubican prácticamente día por día a don Felipe y doña Letizia: la boda del padre de la entonces princesa, en Llanes (Asturias), audiencia con el Papa Juan Pablo II en Roma (donde pasaron un fin de semana de turismo), entrega en Navarra de los Premios Príncipe de Viana, regata de vela en Valencia, cena de gala por la visita de Estado del presidente de Perú, entrega de despachos militares...

Esos actos se extendieron por el mes de julio, hasta que los príncipes partieron a su primer viaje oficial a México. Al volver, el 23 de julio ya estaban en Mallorca, donde disfrutaron de las vacaciones tradicionales en Marivent hasta que el 11 de agosto viajaron a Asturias a visitar en el hospital a la abuela paterna de doña Letizia.

Después se trasladaron a República Dominicana, pasaron varios días en Atenas para seguir los Juegos Olímpicos, y a final de mes don Felipe voló a Panamá para la toma de posesión del nuevo presidente.

Por tanto, queda claro que don Felipe y doña Letizia sólo estuvieron ‘desaparecidos’ entre el 31 de mayo y el 23 de junio de 2004. Su luna de miel no duró meses, ni se extendió hasta el mes de agosto.

De hecho, Confidencial Digital fue revelando entonces algunos de los destinos por los que pasaron los recién casados. El 3 de junio contó que se les había visto en la isla tailandesa de Koh Muk, muy turística, y que se alojaron en el Hotel Trang Thana Road.

El diario ABC recogió la noticia del paso por Fiyi, que dio el diario local The Fiji Times, así como otros puntos donde fueron localizados, y se hizo eco de que los rumores eran tantos que a la vez les situaban en Omán y en México.

También fueron reconocidos –y así se contó en estas páginas el 7 de junio- en un vuelo de la India a Pekín. El comandante del avión quiso saludarles (“en español de Salamanca”) y se hizo una foto con ellos.

Por último, el 16 de junio ECD reveló que los príncipes iban a terminar su luna de miel con un crucero por el Mediterráneo, a bordo de un barco de un conocido armador griego, que empezó en las islas griegas y concluyó en Italia. Desde allí volaron a Madrid para acudir a la celebración del santo de Juan Carlos I. Acabó así un viaje de novios por el extranjero de menos de algo más de tres semanas... y no de dos o tres meses.

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