Felipe VI celebra varios actos sin altercados entre las manifestaciones por Hasél y la conmemoración del 23-F

Los altercados por la detención de Pablo Hasél, condenado por delitos de injurias a la Corona, y el inminente aniversario del 23 de febrero, hito en la historia reciente de la monarquía española, no ha alterado la agenda institucional de la Casa Real.

A un día de la 40ª conmemoración del intento de golpe de estado del general Tejero en un joven Congreso de los Diputados, no ha habido altercados significativos en los actos que ha celebrado Felipe VI durante la semana de disturbios en las calles de varias ciudades españolas.

Don Felipe ha acudido con normalidad a todos los actos que tenía previsto esta semana: audiencias con el INE, la Cámara de Comercio estadounidense, en la Base militar de Retamares o la última, en la V Cumbre Empresarial por la Competitividad de Aragón. El rey tampoco ha querido hacer referencia a los disturbios que se suceden por el país y que han puesto a la monarquía en el punto de mira. La semana anterior al encarcelamiento de Pablo Hasél, enclaustrado en la Universidad de Lleida, el Ayuntamiento de Barcelona borró un mural en el parque de las Tres Chimeneas en el que se dibujaba a Juan Carlos I rodeado de varios descalificativos, como "ladrón".

El homenaje a los acontecimientos del 23F comenzará a la 13:00 de la tarde en el Congreso, institución que ofrecerá una señal en directo. Está previsto que el rey Felipe VI dirija unas palabras en el acto junto con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet.