Las costumbres de Felipe VI cuando viaja en avión
Beber una botella de agua antes de despegar o dormir para llegar despejado a su destino, son algunas de las manías que tiene el rey cuando vuela
La actividad oficial lleva al rey Felipe a viajar con frecuencia en avión. Se traslada en los aparatos del 45 Grupo del Ejército del Aire, normalmente en un Airbus A310
Personas que han compartido vuelos con el jefe del Estado cuentan a El Chivato algunas costumbres del rey al volar. Es común ver cómo antes de despegar abre y bebe una botella pequeña de agua.
Habitualmente don Felipe aprovecha los trayectos en avión para dormir. Así llega despejado a su destino, donde suele comenzar una visita oficial a algún país extranjero, o participa en algún acto oficial.
Cuando no duerme, lee los periódicos o charla con la tripulación del avión o con el equipo de seguridad que le acompaña.
Más activo se suele mostrar Pedro Sánchez cuando vuela en un Falcon 900 del Ejército del Aire. Quienes le conocen llegan a comentar que “aprovecha demasiado el tiempo” durante el trayecto.
Cuentan que el presidente del Gobierno “no para de trabajar” en los aviones: lee y estudia informes, prepara discursos...
En las pocas ocasiones en las que comparte vuelo con periodistas, sí le gusta acercarse a charlar con ellos.
Rara vez se duerme en estos viajes, sólo en algunos viajes largos se le ha visto echar una cabezada en el Falcon, sin duda uno de los elementos por los que recibe más críticas. Pero personas de su confianza defienden que es un medio de transporte imprescindible para cualquier presidente, ya que ahorra tiempo y le permite visitar varios lugares y mantener diferentes reuniones a lo largo de un día.
